Un sorbete de fruta puede ser un postre o un tentempié dulce y refrescante, pero también puede introducirse en una copiosa comida de celebración como "cortante" entre dos platos. Ayuda, en ambos casos, a mejorar la digestión y a aligerar las sensaciones cuando la comida es copiosa o contundente. En este caso, y gracias a nuestra amiga experta en dulces Mari Carmen, proponemos un ligero y apetecible sorbete de buen melón blanco. Por supuesto, la receta admite variantes con el melón naranja y "Cantaloup". Esta fórmula está sazonada con azúcar y menta, sin ingrediente alcohólico alguno. Si se quiere incorporar algún espirituoso, licor o aroma de alcohol, admite el cava o bien unas gotitas de vodka, si se trata de melón blanco, o bien unas gotitas de oporto, si se opta por el anaranjado y el Cantaloup.
Ingredientes:
Un melón dulce y en sazón.
Un yogurt natural entero.
Una medida de azúcar (en el vaso del yogurt)
Cuatro hojas de menta.
Un vaso de hielo picado
Elaboración:
Pelar y despepitar el melón y trocearlo. Reservar algunas bolitas, cortadas con el instrumento adecuado, si se quieren guardar como guarnición o adorno.
Colocarlo en un recipiente hondo junto con el yogurt, el azúcar, la menta troceada y el huelo picado.
Batir y servir en el momento de llevar a la mesa. Adornar con bolitas de melón o una hoja de menta fresca.
Truco: Incorporar siempre el hielo a última hora. Guardar los ingredientes en la nevera, para que estén muy frescos en el momento de la preparación y el servicio. En el caso de incorporar aroma o ingrediente alcohólico, hacerlo con mucha moderación, para que siga predominando el sabor dulce y afrutado del melón y el frescor de la menta.