El bacalao puede proceder de Groenlandia, de Noruega, de Islandia o de Escocia. En general, el buen bacalao se pesca en las frías aguas del Atlántico Norte, y llega a nuestros hogares fresco, congelado o en salazón. Tradicionamente hemos comido bacalao desalado en sus múltiples formas, pero su sabor es siempre inconfundible. En esta ocasión, hemos utilizado lomos de bacalao guisados al estilo tradicional, con tomate de la huerta confitado y pimiento morrón. Un plato sano, natural y muy sabroso, que aporta un saludable contundente toque a nuestra mesa.
Este pescado azul es apto para todos los públicos. Sano, nutritivo y sin contraindicaciones de ningún tipo. En su guiso de cebolla y tomate resulta jugoso y suave, a la vez que contundente, como plato principal acompañado por una buena guarnición. Ideal para tomar caliente, acompañado por un puré de patata natural o un arroz cocido o vaporizado, o frío, como entrante en verano. Se trata de un pescado de temporadas, que hoy puede encontrarse en pescaderías o supermercados durante todo el año. Si ser trata de un bonito de lonja, será insuperable.
Un pescado noble, asequible y muy sabroso. Se puede cocinar de múltiples maneras, pero el horno es fundamental para sacarle todo este partido. La dorada constituye un plato saludable, y puede formar parte tanto de un menú festivo, como del diario. Combinada con ajos dorados y con patatas a lo pobre resulta insuperable.