La merluza a la romana es un plato tan exquisito como sencillo de cocinar. Puede tomarse frío o caliente, y resulta sanísimo acompañado por una buena y fresca ensalada verde. Si su fritura se realiza en aceite de oliva, el sabor es delicado, suave y delicioso. El secreto está en la calidad de los ingredientes, y en controlar la temperatura del aceite. Todo un plato de pescado que, aliñado con unas gotitas de limón, gusta muchísimo.
Ingredientes, para cuatro personas:
Cuatro buenos filetes de lomos de merluza fresca. También puede hacerse con rodajas de merluza fresca o ventresca de merluza congelada. La cantidad dependerá de los gustos de los comensales.
Harina.
Dos huevos frescos.
Sal.
Aceite de oliva.
Limón, opcional.
Elaboración:
Salar la merluza y enharinarla.
Poner mientras una sartén con aceite a calentar, a fuego medio.
Pasar los filetes de merluza por huevo batido, e ir pasando a la sartén, cuando el aceite esté bien caliente pero no humee.
Dar la la vuelta y dorar la merluza en el aceite caliente, a fuego no demasiado algo.
Retirar, en una fuente con papel absorbente.
Emplatar, con unos trocitos de limon.
Servir, con ensalada o mahonesa casera, según gustos.
Truco:
Si se es sensible o alérgico al anisakis, presente en algunos pescados, es recomendable cocinar buen estos alimentos, o bien congelarlos, antes de cocinarlos. Por otra parte, si se congela el pescado fresco o se utiliza pescado congelado, es aconsejable descongelar al natural, con tiempo, y dentro de la propia nevera. Así conserva todas sus propiedades nutricionales.