El escabechado es una semiconserva muy apreciada por su sabor y practicidad, ya que resuelve muchas comidas de manera sencilla. Es un éxito en la mesa, y se puede degustar frío o caliente, a elección de los comensales. Estos muslos de pollo escabechados se pueden conservar en la nevera durante semanas, siempre que estén bien cubiertos con su propio caldo y jugo de cocción. Se trata de un plato de la cocina tradicional, aunque no por ello deja de estar presente en nuestras neveras. Puede tomarse como plato principal, con una guarnición caliente, o, desmenuzado, en una rica ensalada, como entrante de lujo.
Ingredientes, para una docena de muslos de pollo:
Doce muslos o jamoncitos de pollo.
Un litro de aceite de oliva.
Un vaso de unos 250 C. C. de vinagre de vino.
Un vaso de unos 250 C. C. de vino blanco seco.
Una cabeza de ajos, una rama de tomillo, otra de romero, dos hojas de laurel, sal y unos doce granos de pimienta.
Elaboración:
Colocar en crudo y en frío, en una cazuela, los muslos de pollo previame salados. Disponerlos de tal manera que quede el menor espacio posible entre ellos. Esa misma cazuela podrá servir de recipiente para conservar el escabeche, una vez guisado y frío.
Cubrir con el aceite, el vinagre y el vino, y añadir el tomillo, el romero y el laurel. Si se desea, esas hierbas aromáticas pueden ir atadas en lo que se denomina un "bouquet garní".
Añadir la pimienta y los ajos, también crudos.
Cocer lentamente, durante aproximadametne una hora, hasta que el pollo esté bien tierno.
Dejar enfriar y reposar, en frío y sin luz, durante al menos cuatro días antes de consumir. Una vez reposado, los sabores del escabeche quedarán potenciados.
Truco: El escabeche puede completarse con cebollas y zanahorias picadas muy finamente y añadidas al guiso desde su inicio.